El Tradicional Cortamonte o Yunza Ayacuchana

Una expresión característica del Carnaval Ayacuchano es sin duda el cortamontes o yunza. La danza, la música, el juego y la alegría desbordante se ponen de manifiesto a través de grupos familiares, instituciones, amistades, principalmente los pobladores del barrio. En un principio, la organización lo realiza la comunidad entera, para luego recaer en una pareja al que son llamados “padrinos” o “mayordomos”, naturalmente no son esposos.


Días antes del carnaval, los apadrinados, apoyados por otras personas  organizan la yunza, para lo cual se acostumbra ir al valle mas próximo, como: chacco, Muyurina, Huatatas, Huayhuacondo, etc., para desde ahí traer el molle para el cortamonte, se traslada generalmente con movilidad, para luego plantarlo. Llegado el día central de carnaval, por la mañana, el árbol es adornado con muchas serpentinas, globos de diferentes tamaños y colores. Seguidamente es plantado en el lugar fijado por los padrinos o mayordomos, cuelgan en ella muchos regalos como: objetos de plástico (lavadores, baldes, cestos, juguetes, etc.), prendas de vestir, frutas, galletas, entre otros. Luego de un almuerzo que generalmente es un plato típico como el Puchero, salen los mayordomos talqueados y adornados con serpentina y cuyo rasgo característico es que llevan una manta huamanguina, cruzado en el pecho, y un hacha para cortar el monte. Junto a ellos los acompañan familiares , amigos, vecinos quienes haciendo pareja bailan al rededor del árbol y desde luego todos adornados con serpentina y pintados con talco y quienes también invitarían al ruedo al público espectador entre vasos de chicha, bebidas de la región y mucha cerveza.

El árbol pareciera cobrar vida con todos los adornos que lleva, mientras que los danzantes lo hacen en círculo al compás de de la música. La pareja de mayordomos son los que inician el corte del árbol, entre movimientos de baile dan dos o tres golpes de hacha o machete al tronco; éstos mismos escogen a la pareja siguiente para así alternar con las otras parejas.

Yunza

Tragos van, tragos vienen, las horas pasan rápidamente, todo es risa y alegría, las parejas de danzantes tienen más fuerza, no parecen sentir cansancio, el tronco del árbol que ya es sostenido por una pequeña astilla, hasta que una última pareja la toca y el árbol cae estrepitosamente al suelo, los espectadores entre jóvenes y niños se abalanzan sobre ella para atrapar  algún regalo, sin importarle que la pisoteen o la aplasten; los más cautos desde los alrededores lanzan baldazos de agua y globos; la risa y carcajada llenan los corazones de toda la multitud.

La pareja que derribó el árbol se convierte en los mayordomos o padrinos para el próximo año, ese mismo día aprovechan para comprometer a los presentes haciéndolos firmar y apuntar su colaboración voluntaria.